La canela es la corteza interior seca de árboles del género Cinnamomum, de Asia tropical, pariente lejano del laurel. Cuando se corta la corteza se enrolla formando unos canutos, que son las ramas de canela que se comercializan.
La canela fue una de las primeras especias que llegaron al Mediterráneo. Los egipcios la empleaban para embalsamar.
Existen varias canelas, pero las que más se comercializan con la asiática (C. cassia, C. loureirii, C. burmanii)y la de Ceilán o de Sri Lanka (C. verum y C. zeylanicum). La primera es más robusta, más fuerte, de sabor más amargo y picante (debido al cinamaldehído, un compuesto fenólico) y se enrolla en forma de doble espiral; en cambio, la segunda es más delicada, quebradiza, con sabor más dulce y se enrosca en forma de una sola espiral.
Es increíblemente maravilloso saber la gran variedad de nutrientes y fitoquímicos que tiene la canela: calcio (1.002 mg/100g), hierro (8,32 mg/100g), magnesio (60 mg/100g), fósforo (64 mg/100g), potasio (431 mg/100g), zinc (1,83 mg/100g), betacaroteno (112 µg/100g), vitamina E (2,32 mg/100g), vitamina K (31,2 µg/100g), y proantocianidinas (8.083 mg/100g).
Estudios reflejan que la canela ayuda a reducir la glucemia (niveles de glucosa en sangre) y que baja la presión sistólica y la diastólica.
En Medicina Tradicional China siempre se la considera un alimento de naturaleza templada, por lo que siempre se recomienda en las épocas más frías del año, o bien para aquellas patologías que cursen con “frío” o “humedad” o “viento”.
Por ello, en base a la MTC, calma el dolor, favorece la circulación de la sangre y promueve la sudoración. Así será útil en dolores reumáticos, resfriados, dolor menstrual o dolor abdominal por frío o falta de apetito.
Sin duda, si tienes frío prepárate una infusión de jengibre y canela y te aseguramos que entrarás en calor rápidamente.
COCINA FUNCIONAL CON CANELA: